sábado, 26 de marzo de 2011

Realidad Aumentada

Los dos aspectos que analizamos en la última clase del Profesor de las Heras resultan fascinantes: por un lado el hecho de que en este nuevo mundo virtual lo grande y lo pequeño tengan cabida al mismo tiempo y las posibilidades de ambos se acerquen; y, de otro, la posibilidad de que ese mundo virtual, del que puedo entrar y salir, acabe diluyedo tanto sus fronteras con el mundo real que llegue un momento en que, en palabras de De las Heras, el primero acabe derramándose en el segundo. Esto está sucediendo gracias a la Realidad Aumentada (RA) que viene a sumarse a dos realidades ya estudiadas en clase: la virtual y la especular.

Cuando hablamos de RA nos referimos a una visión directa o indirecta de una parte del mundo real, combinando con él elementos virtuales para crear así una realidad mixta en un espacio-tiempo determinados. Añadimos, a través de una serie de dispositivos, información virtual a la información física que tenemos. En esto radica la diferencia con la Realidad Virtual ya que, al contrario que ésta, no sustituye a la realidad física sino que la complementa sobreimprimiendo los datos informáticos.  

Sus posibilidades son increíbles: en libros, material educativo, simulación de operaciones de cirugía, mecánica, simulacros de seguridad, arquitectura, arte, etc. Una de mis aficiones es el buceo y me parecería un sueño sumergirme con una cámara de video y que cuando enfocase a alguna de las especies me saliese toda la información de lo que en ese momento estoy viendo. El problema, como siempre, está en los extremos y podríamos dedicar demasiado tiempo a mirar la pantalla en vez de disfrutar de aquello que realmente estamos viendo.¿Qué sucederá cuando esos dispositivos ya no sean una cámara sino, por ejemplo, unas gafas o unas lentillas? He encontrado un video en la web que creo que explica muy bien todo este interesante y prometedor proceso.





miércoles, 23 de marzo de 2011

Un nuevo mundo plegado

Me pareció muy sugerente la imagen que el profesor de las Heras nos dio en clase sobre los pliegues que conforman el nuevo mundo digital. Me recuerda a cuando era pequeña y doblando una hoja de papel sobre sí misma varias veces, construia una especie de juego en el que moviendo el artilugio creado con los dedos tenías que elegir un color y al hacerlo, el papel se iba levantando y surgían de él diferentes mensajes. Ahora, con el libro digital, tenemos en nuestras manos la mayor figura de papiroflexia que el hombre jamás pudo imaginar: el libro-mundo, el libro de libros, ese sueño que desde siempre hemos perseguido queriendo construir la novela total.  

Todas esas cualidades del nuevo mundo que se nos presenta tras el espejo: densidad, accesibilidad, espacio blando, especularidad, disolución, ubicuidad y deslocalización, se pueden ver perfectamente reflejadas en este nuevo soporte que en unos años se situará muy de cerca junto al libro de papel. Podremos tener muchos libros en uno solo; la cultura y la lectura estarán más que nunca al alcance de casi todos; podremos retocar y versionar nustros propios relatos sin dejar huella y con muy poco coste; mezclaremos, si así lo deseamos, imagen, texto y sonido, lo que permitirá un sinfin de posibilidades creativas al alcance de los  autores; nos moveremos por la historia y podremos caminar por diferentes lugares para llegar a finales distintos.

Lo que hace solo unos años ponía los pelos de punta a las editoriales, el año pasado, en la feria de Frankfurt, se convirtió en el centro de atención de todos los asistentes, y ello a pesar de que Gottfierd Honnefelder –presidente de la Asociación Alemana de Editores y Libreros– comenzó su discurso de apertura en la Feria -parafraseando a Umberto eco-, afirmando que "la invención del libro es como la de la rueda o la cuchara, perfecta, no se puede mejorar”.

Como vemos, este es un ejemplo de resistencia claro: las palabras de apertura se contradecían con el hecho de que la feria destinase gran parte de su espacio y recursos a este nuevo soporte y de que la mayoría de las editoriales lleven años trabajando con las versiones digitales de todo su catálogo. Quizás en poco tiempo el sueño de muchos padres se convierta en realidad cuando sus hijos se vayan al colegio con una pequeña y ligera mochila en la que irá el bocadillo y un libro digital.


lunes, 14 de marzo de 2011

A day made of glass

He leído todas vuestras entradas relacionadas con la última clase y la verdad es que habéis hecho un buen resumen de todo lo que allí se ha dicho, con ideas nuevas e interesantes ejemplos. Con la intención de no repetir lo mismo he buscado por la red y he encontrado un video que a mi me ha parecido increíble (y que seguro que muchos de vosotros ya conocéis) sobre la idea de la que nos hablo el profesor de las Heras refiríendose a ese nuevo paso que hemos dado con las "tabletas", esos nuevos soportes que están intentan do sustituir a los portátiles más pequeños y que son completamente táctiles.


Precisamente, en El país salía hoy una noticia advirtiéndo de la posible burbuja de los tablets para el 2011 si las ventas no cubren las enormes expectativas que tienen los fabricantes. Volviendo al video del que os hablaba, en el se representa lo que sería el día a día de una perosna (eso si, de clase media-alta) en un futuro cercano, con las nuevas pantallas de cristal invadiendo cada acto de nuestra vida. El video es un poco exagerado pero creo que refleja a la perfección lo que nos espera; esa nueva forma de interactuar con el mundo digital sin que apenas lo notemos, rompiendo las barreras espaciales y temporales que hasta ahora dividían esas dos realidades.


domingo, 6 de marzo de 2011

Un pixel en la tierra...una mota en el Universo

Me impresionó mucho la imagen  que nos dio el profesor de las Heras sobre lo que los seres humanos ocupamos en la Tierra, a pesar de que el ordenador decidió dejar de funcionar en ese momento y tuvimos que utilizar nuestra imaginación. La mía, de siempre, ha funcionado muy bien y no me costó ver mentalmente una superficie de 77Km en Castilla-La Mancha llena de gente sentada en sus sillas, nada menos que 6 millones de seres humanos, que cabían en ese pequeño espacio. Pero si además, lo viésemos desde fuera, imaginaos lo que supondría esa mancha vista desde cualquier otro planeta...una pequeñísima e invisible mota en nuestra pequeña galaxia dentro de un inmenso Universo. Y, a pesar de que eso es lo que somos, hay que ver la que hemos liado. Y todo gracias o a causa de esa red cultural de la que hablábamos; eso es lo que nos hace pesar tanto y creernos tan importantes. 

Las nuevas tecnologías -que según lo escribo ya se están quedando viejas...-nos permiten aumentar esa red exponencialmente y a una velocidad de vértigo, pero dependiendo siempre de que estemos conectados. El problema -o la suerte, según lo veamos- es que esa conexión no es igual para todos; lo que en principio parece que elimina fronteras y nos hace más iguales, también está marcando muchas diferencias y trazando una enorme brecha entre los que están en la red y los que no. Y esto es así se trate de un pueblo de España sin conexión o de un país entero o un continente mal comunicado. 

Pero no hemos de caer en la falacia de pensar que lo que allí sucede no es cultura; me viene a la mente una expedición que realizó un amigo mío, buzo y fotógrafo profesional, a Papua Nueva-Guinea hace un año. En esos mares sin explorar descubrieron en muy poco tiempo más de trescientas nuevas especies; navegaron por el río Sepik -similar al Amazonas o al Congo- en canoas durante varios días y después de un duro trecking de varias horas llegaron hasta una región inóspita a visitar una tribu. Les acogieron con amabilidad y no comprendían a que se debían tantos abrazos; la felicidad venía de la novedad ya que hacía más de veinte años que no veían a un hombre blanco y, de hecho, para muchos niños y jovenes era su primera vez. Convivieron con ellos algunos días sin conexión a la red pero disfrutando de la enorme cantidad de tiempo libre que su principal ocupación, la caza, les dejaba, sobretodo a los hombres. En esos espacios hablaron del canibalismo y el jefe de la tribu les aseguró que ya no se practicaba, que era algo de la "antigüedad"; cuando le preguntaron que era para el la antigüedad, cuantas generaciones habían pasado, contestó que un poco antes de que viesen a ese último hombre blanco, o sea, unos veinte años. 

Evidentemente la noción del tiempo allí era muy distinta y probablemente no entenderían nuestra desazón cuando navegamos por esos mares de unos y ceros y una página tarda en cargarse en nuestra pantalla más de dos o tres segundos...

miércoles, 2 de marzo de 2011

Trabajar y vivir en la nube

Es el eslogan de una feria parecida al SIMO, llamada CeBIT, que se ha celebrado en Alemania. El tema central del artículo ya lo comentamos en clase y está relacionado con la posibilidad que nos abre la red de almacenar y trabajar con documentos que no están ubucados en ningún lugar concreto de este mundo sino en "la nube". Afirma que ya hay ya empresas como Amazón que venden espacio profesional en esa nube que, en principio, no es de nadie y es de todos. En fin, ya no vamos a luchar toda una vida e hipotecarnos por comprar un piso o una parcelita en la Tierra sino por poseer espacio en esa nube carente de él. Además, ya no podremos decir a nuestros hijos o nietos a modo de regañina que "están en las nubes" o que "bajen de la nube" por que me temo que van a pasar más tiempo, laboral y de ocio, allí que aquí.

martes, 1 de marzo de 2011

ROUCO VARELA: haciendo amigos en la red.

Hoy me he despertado escuchando una noticia  en la radio sobre la reelección del Cardenal Rouco Varela como Presidente de la Conferencia Episcopal. Creo que no es una buena noticia, sobretodo para los católicos; la Iglesia pierde miles de seguidores año tras año y no hace nada paar solcionarlo. Todo avanza y ellos, de la mano de personajes como Rouco, siguen estancados en su mundo medieval. El sabado visite la Catedral de Palencia y en misa de diez había una doce personas de edad avanzada; las iglesias se vacían y los escándalos de pederastia se suceden un año tras otro. Aún así y con la que les está cayendo, el Cardenal se atreve a demonizar las relaciones homosexuales y la propia red social por propiciar un estilo de vida virtual y vacío. Estoy de acuerdo en que en internet, como en la vda, no todo vale, es evidente, pero ¿ a que se referirá el Sr. Rouco cuando dice que la red se ha convertido en propagación de fórmulas de vida de todo tipo, sin excluir las menos acordes con la dignidad humana? A mi , personalmente, me da escalofríos pensarlo...